Tu semblante...

   Verte en una foto y no reconocerte pero aun así ver tus brazos y tu pecho, cerrar los ojos y sentir tu abrazo, tu seguridad, tu confianza y la estabilidad que solo tú puedes darme.
   No puedo creer ver tu foto y no reconocer tu sonrisa pero escucharla retumbando en mi mente y hacerme parte de tu voz que está en mis genes y me define más que mi nombre.
   Mirar una foto y ver una persona más, pero en mi fondo es tanto lo que me falta que solo cerrar los ojos me hace encontrarte tan mío como yo misma, tan necesario como la vida, tan certero, tan inherente, tan yo que es mas que yo misma...cerrar los ojos y necesitarte , extrañarte, añorarte, a diario buscarte y lo más triste...no encontrarte, cerrar los ojos y anhelarte, agradecerte , esperarte...bendecirte, honrarte...ver una foto y recordarte, desesperarme, pero saber que soy lo que soñaste, lo que creaste... no quiero más fotos...quiero abrazarte!

Mi compromiso...

Hoy por alguna razón que no recuerdo pero que debe estar alejada de la casualidad comencé a  investigar sobre algunos estudios de teatro musical, stage management y producción artística,  de entrada debo decir que me despertó ese hambre voraz por el campo de las ideas que hace bastante tiempo no sentía, asumo que estaba en camuflaje debido a que uno termina volviéndose parte de un sistema productivo que en realidad de productivo no es que tenga mucho, nos volvemos dignos de cualquier personaje del principito donde bien sea que contemos estrellas que no nos pertenecen pero son nuestro tesoro y principal obsesión, o que apaguemos y prendamos un farol mecánicamente sin conocer si quiera su utilidad pero es el trabajo que  debemos cumplir se convierte en el motor de  nuestras vidas sin detenernos a cuestionar la funcionalidad de nuestro esfuerzo tanto para nosotros mismos como para eso que llamamos sociedad pero que preferimos ignorar.

En un idioma más claro, se ha vuelto más importante la matemática para que cuadren los presupuestos económicos del mes que adentrarse en ese mismo mundo mágico pero más profundo que llamamos música, la cual no es más que la misma matemática pero con alma y que debería ser nuestro principal aliado al momento de crear, no de copiar, ¡de crear! Porque al fin y al cabo ESO es lo que hace un artista y nosotros nos jactamos de decir que hacemos arte.

Me detengo en este punto porque siento que escribir sobre el quehacer de mi profesión termina siempre en un momento de catarsis que si bien es necesario creo ya que hay que avanzar en propuestas más que revolcarnos en un charco de quejas e inconformidades que todos conocemos bien porque las vivimos, las aceptamos y las reproducimos sin un mínimo de esfuerzo por poner en práctica la consciencia que tanto esperamos del colega. Considero que de acuerdo a lo que afirman los psicólogos el primer paso para solventar un problema es reconocerlo y es momento ya de asumir que  nosotros somos el problema.

Partiendo de allí recordé una situación que sufrí a diario en la Universidad y es la escasez increíble de registros escritos, críticas, análisis y demás material investigativo en torno al arte y principalmente a la danza el cuál es un arte que se queda en el hecho y le ha costado mucho trascender precisamente por ese miedo y esa pereza del bailarín, coreógrafo, creador , productor e incluso público consumidor de danza de sentar precedentes y dejar registro de lo que es  este arte más allá de la experiencia.

En ese sentido y recordando aquella pasión que me ha motivado a tantas cosas dentro del profundo mundo del arte decidí dejar mi aporte, no me considero escritora ni crítica, probablemente esto sólo lo lea yo o dentro de 200 años sea una referencia obligada en alguna Universidad, sólo sé que Isadora Duncan era para muchos una loca, Laban no creo que estuviera tan consciente de lo que sus estudios aportarían a la danza, Noverre celebraba en su cumpleaños lo que es hoy el día internacional de la danza y estoy segura de que mis amados maestros de los que he aprendido tanto, no tienen la más mínima idea de lo que han sembrado. Así que ¿qué tanto? ... puedo escribirlo y hasta olvidarlo o arrepentirme siempre por no haber aportado.

Nos leemos pronto 😉

De esas noches...

De esas noches, esas eternas noches…

De esas en que soy presa cautiva de la ansiedad y el silencio grita, ensordece y da náuseas. De esas en que la ausencia se hace presente y se puede tocar, en la espera de la nada que al final lo es todo, porque es todo lo que espero y sigo recibiendo nada.

De esas malditas noches en que me exijo llorar a ver si dreno este mar de emociones y no lo consigo, al parecer ni siquiera eso está en mi dominio , me niego a creer que debo sólo aceptar esto y vivirlo.

Esta noche es de esas donde el recuerdo se va lejos con la nostalgia y te traslada a través de todas esa vidas que son tuyas pero ya no te pertenecen, ya nada es lo que fué y nadie sabe lo que será, porque es que ni siquiera puedo creer esta noche en que el mismo Dios tenga la respuesta a algún por qué, es que ni siquiera apuesto a su existencia porque hasta la mía es un supuesto y todo lo que me rodea está en veremos.

De esas asqueantes noches en la que te aferras a todo lo que ya no está con alguna esperanza de robarle vida a un muerto para poder seguir viviendo.

Esas noches donde lo menos oscuro es el cielo y al cerrar los ojos todo se vuelve más negro, de esas de las que estás seguro que saldrás, que es sólo un momento, pero es eterno, cruel y espeso, el mundo parece haberse apagado y no se enciende ni una luz, al parecer ellas también tienen miedo...

ESE hombre...

Un día simplemente lo entendí…

Tanto buscar, tanto no entender, descubrí lo que era tan obvio…

Hay un hombre que cambió su vida por amor, aunque sé que no lo planificó se enfrentó a ese sentimiento y lo asumió como un gran paso en su vida, ese mismo hombre ha sabido siempre mirarme a los ojos con extrema sinceridad y me ha hecho sentir siempre especial. Un abrazo suyo es uno de los lugares más perfectos que conozco porque borra cualquier aflicción, llena de energías y me hace sentir tan pequeña y protegida.

Ese hombre me ha dado todo lo que he necesitado, con mucho o poco, material tal vez, pero me ha regalado innumerables recuerdos, momentos especiales, aventuras, aprendizajes , GRANDES aprendizajes.

No ha sido perfecto, ningún hombre lo es, por más que soñemos con un príncipe azul de cuento de hadas, cada día es más fácil darse cuenta de que todos somos humanos y equivocarse es lo más fácil de vivir, lo importante es dar espacio al reconocimiento y querer cambiar.

Este mismo hombre me ha demostrado incontables veces que está conmigo en las buenas, las malas y las peores, es capaz de atravesar el país en cuestión de horas si así lo necesito (Literal) sólo para estar a mi lado y demostrarme que jamás me abandonaría y recordarme de qué estoy hecha.

Sin duda alguna ÉL como nadie más se enfrenta a quién sea para protegerme y no puedo más que agradecerle por siempre. El que por momentos no ha estado cerca pero JAMÁS he dudado que está conmigo.

Un día simplemente lo entendí...ESE hombre “perfecto”, el incondicional, el que merezco, el que me saca canas verdes pero estoy plenamente consciente de que me ama con su vida, ese que entregaría su vida por mí y que aunque no soy la única en su vida SÉ que tengo un lugar importante y con eso soy feliz...LO CONOZCO… se llama Wilfredo Bolívar pero yo le digo PAPÁ!

Que bendición tenerte...TE AMO!

Noslen...

¿Cómo te perdono? ¿Cómo te respeto y entiendo que lo decidiste así? ¿Cómo me perdono yo por no haberte atajado a tiempo en esta caída libre? ¿Cómo te juzgo? ¿Cómo no hacerlo? ¿Cómo abrazarte una vez más,una, una sola...la mil una...pero una maldita o bendita vez más?

“Esto también pasará…” y la vida nos pasó amigo. Mi príncipe porque yo era su princesa. Un abrazo tan sincero…

Estabas loco, tan loco, nuestro loco tan cuerdo...esa sensibilidad que traspasaba los sentidos y hacías a cualquiera irse en ese viaje contigo y aterrizar riendo.

Un cuerpo que era danza y no supo reconocerlo, que lo sabía , que lo vivió pero tenía sus propios miedos… Recuerdos, risas, lágrimas, consejos, de nuevo risas y avanzar, nos transformamos en el tiempo , ese mismo que es tan cruel y nos va poniendo viejos, te bajaste del tren y sigo abrazada a tu puesto, quizás no era el inmediatamente cercano porque así vivíamos pero sabía que al cruzar este vagón siempre podía conseguirte y hoy simplemente te cansaste del viaje, o al menos tu cuerpo…

Poesía, pintura, movimiento…

Flashes en mi memoria que llaman recuerdos, me inundan, me ahogan, me revuelven para luego devolverme a ese silencio ensordecedor que puede enloquecerte..dime...cómo te suelto?

Un café, una torta, diez cocuys, una pizza, mi casa, bellas artes, unearte, amigos, juventud, sueños, errores, lágrimas, risas, más errores, más risas, aprender que lo rico de ser amigos es ser diferentes y abrazarnos fuerte…

¿Cómo volver y saber que ya no estás? Quizás ahora te tengo más cerca porque te multiplicaste en ese cosmos que no cabía dentro de tí...pero te me volviste intangible y ya no tendré más tus abrazos…

Vuela amigo, expandete en tu totalidad eterna y psicodélica, encuéntrate con nuestro principito y dile que aquí en la tierra habemos quienes creemos en él , dile que hoy me estoy muriendo pero que seré fuerte…

“...Cuando volví a mi país los compañeros que me vieron se sintieron muy contentos de verme vivo. Yo me sentía triste, pero les decía: “Es el cansancio…”. Ahora ya me he consolado un poco. Bueno, quiero decir que no estoy consolado del todo. Pero sé que el principito volvió a su planeta, porque cuando amaneció el día no encontré su cuerpo. Un cuerpo que no era tan pesado...Y por la noche me place escuchar a las estrellas...Y éste es, para mí, el gran misterio. Para vosotros, que también amáis al principito, al igual que para mí, nada en el Universo podrá ser igual si en alguna parte, no se sabe dónde, un cordero que nosotros no conocemos se ha comido, o no, una rosa...Y ninguna persona en edad adulta comprenderá jamás que estas cosas sean verdaderamente importantes.”

Vuela mi principito...mi NosVerde.

TE AMO

Una llamada sin terminar, un almuerzo igual, un nudo en la garganta que es consecuencia de una y causa de la otra, unas ganas inmensas de correr y estas ganas incontenibles de llorar.

Han sido días difíciles, de preguntarse muchas veces ¿Por qué?  y ¿Para qué?, de no hallarse y aún así tener que continuar, de millones de sonrisas y momentos inolvidables, pero de tantas batallas que a veces no se sabe ni para qué se luchan. Han sido días de tanto por hacer o tan poco que aprovechar, han sido días en los que olvidé que te extrañaba, en los que me acostumbré a vivir sin ti y olvidé que eres mi vida. Sé que estoy tan segura de que estás que te siento omnipotente, que la mayoría de los días no me haces tanta falta porque simplemente no has dejado de estar, pero hoy, hoy tampoco te extraño...TE NECESITO!

Un abrazo en silencio,tus peleas a cada segundo, esa manera de amar tan tuya pero tan de verdad, ese “hogar al cual por siempre volveré” porque tú estás ahí, esa plataforma que me mantiene a flote para llenarla de orgullo, porque así me lo exige o simplemente para llevarle la contraria, esa necesidad de ser cada vez mejor y de no convertirme en nada que esté en contra de lo que creemos, esa dicotomía entre los valores y la mente abierta, ese “Te amo” que te cuesta tanto pronunciar pero que ni siquiera me hace falta porque no existe manera de dudarlo.

Perdóname pero estoy destrozada, siento que nos pasa el tiempo y con él tu tiempo a mi lado, no sé si valga la pena, perdóname por dudarlo, necesito dejar de obligarme a ser grande y volverme pequeña en tus brazos, a veces no sé qué hacer y necesito que me regañes para encontrarlo.

Quisiera pedirte que no me faltes nunca, daría mi vida porque fueras eterna, eres el mayor significado de la frase “TE AMO”...

Cómo no ser quién soy si soy producto de ellas…

Así comenzaba este escrito hace casi tres meses, por alguna razón nunca lo redacté pero seguía teniéndolo en mente, analizando, observando, en remojo...Hoy en busca de sobre qué escribir recordé que tenía esta asignatura pendiente y como estoy segura de que las casualidades no existen y así como los libros llegan al lector en el momento justo en que este los necesita, supongo que el escribir de alguna manera termina respondiendo siempre a lo que necesitas expresar en el momento. Aquí vamos…

Siempre he sabido que las mujeres tenemos en nuestras manos herramientas , no más ni mejores, pero si diferentes a las de los hombres, se nos ha encajado en perfiles que aunque han variado muchísimo en el transcurrir del tiempo y los cánones sociales, estemos de acuerdo o no nos han moldeado desde el primer segundo de nuestras vidas hasta la mujer que se es ahora o con la que se sueña ser. Así mismo sucede en mi familia (como estoy segura de que ocurre en todas las familias), somos todas totalmente diferentes, distamos a kilómetros de parecernos una a la otra, unas lloronas, otras “insensibles”, unas alegres y alocadas, otras solemnes y cuadriculadas, y así toda una colección, sin embargo, en la mía hay una parte que inexplicablemente compartimos algo: el querer controlarlo todo.

Créanme que le he dado mil vueltas al asunto antes de decidir incluso escribir sobre el tema y sigo sin entender por qué somos así, supongo que es un patrón que se repite pero no ha ocurrido lo mismo con otras características, la verdad, no lo entiendo. Sin embargo, es algo que llama demasiado mi atención.

A todas nos han dicho la nueva versión del “no eres tú, soy yo”, y es algo que reza así como : “Eres una mujer maravillosa, me encantas y te amo...vales demasiado...eres la mejor mujer que he conocido...te admiro….. PERO… siento que no puedo estar contigo” ¿Excusas? Bueno...esa lista es más larga y variada que nuestra colección.

Es algo inexplicable, sí, somos planificadas en extremo, sabemos a la perfección lo que queremos, no podemos mantenernos tranquilas, somos inquietas, tercas, luchadoras, aguerridas, necias, pero ¿Y cómo hay que ser? ¿Un bulto pasivo en espera de las bondades de la vida o de algún hombre que te quiera porque sí, dramáticamente adinerado, con la necesidad de cuidarte y darte todo lo que necesites, que te sea infiel (como todos) pero que llegue todas las noches a casa y te diga que te ama, dedicarte a los niños y mantenerte inmaculadamente perfecta para el benefactor de tu vida?.

¡ I M P O S I B L E !

Primero que nada porque de esos hombres existen como un 1%, segundo porque así me sacara el numerito de la lotería me aburriría al mes siguiente, y tercero porque así como no entiendo nuestro gen común, menos aún entiendo el terror que siente la mayoría de los hombres a estar con una mujer que tenga la capacidad de resolver cosas por ella misma, de soñar, trazarse y lograr metas, de ser su compañera y no su sombra, ¿es que acaso no se sienten ellos con la misma capacidad? Que rico sería ser parte de una pareja que sea precisamente eso “PAREJA”, dónde los dos tengas las mismas capacidades y posibilidades, dónde si tú no puedes yo te relevo y viceversa, dónde se pueda luchar codo a codo con la meta única de evolucionar juntos y tener la estabilidad que te brinda alguien a tu lado.

Juro que mi intención no es ser sexista ni acribillar a nadie, incluso por amor a los mismos hombres se incrementa la incertidumbre, que rico estar con un hombre bien plantado, con metas claras y planes para lograrlas, no entiendo por qué necesitan sentirse o en un extremo omnipotentes o en el otro los niños consentidos de mami, ojalá entendieran que en cualquiera de sus facetas, la mujer que realmente los ama va a estar allí, el equilibrio perfecto radica cuando él también está ahí en las facetas de ellas.

Dedico este escrito al mayor y mejor ejemplo de mujer que conozco: Mi abuela Jenny, quién con más de setenta años de vida, más de cincuenta de casada, habiendo criado casi tres hijos, cuatro nietas y un bisnieto, con la dureza necesaria y con el amor incalculable, con una colección de pastillas que memorizar relativamente proporcional a la cantidad de experiencias y recuerdos, hace poco le dijo Adiós a su amor, a su compañero, al hombre de su vida, no fue fácil ni perfecto, pero JURO que fue AMOR y de eso el mayor ejemplo.